El sentimiento de frialdad del Gobierno regional hacia la ciudad de Toledo, gobernada por el PP, se ha reavivado estos días con el nulo apoyo que el veinte aniversario de la declaración de la Ciudad Imperial como Patrimonio de la Humanidad ha recibido del Ejecutivo de Barreda, en contraste con el amplio abanico de actividades institucionales que han saludado el décimo aniversario de la elección de Cuenca, ciudad con alcalde socialista. Es el último capítulo de lo que desde Toledo señalan como una larga lista de olvidos históricos.
Ya los cronistas toledanos de 1986 lamentaban, quizá con un espíritu más rebelde que el de ahora, la falta de un apoyo decidido de la Administración regional, entonces presidida por José Bono, para comprometerse por la causa de «salvar Toledo». El extinto «Ya» recogía el 26 de noviembre de 1986 que «el Consejo de Gobierno en vez de expresar su decidido apoyo a Toledo para presionar ante el Estado en la consecución de ayudas económicas concretas se descolgó con un comunicado retórico y anodino más propio de unos juegos florales que de una administración institucional comprometida con los intereses de su territorio y de sus ciudadanos».
El que fuera corresponsal de ABC y Cronista Oficial de la Provincia, Luis Moreno Nieto, se refería a este mismo asunto en enero de 1987 en la revista «Hispania Nostra». «Aparte de acordar la iniciación de los trámites precisos para que el Casco Histórico de Cuenca alcance también la misma nominación que Toledo, el Gabinete del presidente Bono se ha limitado, de momento al menos, a hacer una declaración tan llena de retórica como falta de promesas positivas. El Ayuntamiento y especialmente su alcalde (Joaquín Sánchez Garrido) hacen lo que pueden y esperan que ayude el Ministerio de Obras Públicas, pero la verdad es que este apoyo no se ha concretado todavía en ninguna disposición legal», escribía esos días Moreno Nieto.
La reacción de Bono
Y, ¿qué recogieron las crónicas en los periódicos de entonces sobre la reacción de José Bono al enterarse, en 1986, de que Toledo había sido declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad?. Que había que conseguir el título también para Cuenca, por lo que su Gobierno estaba promoviendo que la Unesco declarase a esta ciudad Patrimonio de la Humanidad. Y se consiguió, de forma muy merecida, el 7 de diciembre de 1996 en Mérida (México).
Para celebrar estos primeros diez años, el Ayuntamiento de Cuenca ha organizado más de 120 actos que se desarrollarán hasta finales de año. Para desarrollar este programa se cuenta con 500.000 euros, de los cuales la mitad serán aportados por el Ayuntamiento de Cuenca y la otra mitad por entidades colaboradoras, así como la Diputación Provincial conquense y la Junta de Castilla-La Mancha. Y coincidiendo también con este X Aniversario, según informó la Junta en un comunicado, el Gobierno regional ha organizado también en Cuenca la exposición «Don Quixote ilustrado por Salvador Dalí», que fue inaugurada por el propio presidente de la Junta, José María Barreda. Sin embargo, por ahora, el Gobierno regional no sólo no ha organizado ningún acto para conmemorar estos veinte años en Toledo sino que ni siquiera ha habido algún pronunciamiento desde la Consejería de Cultura o de algún responsable autonómico.
Lo mismo que cuando Toledo celebró sus primeros diez años como ciudad Patrimonio de, el mismo año en que Cuenca recibió la distinción en México, que no hubo tampoco ni una línea, ni un recordatorio de la efemérides por parte del Gobierno regional.
Ya los cronistas toledanos de 1986 lamentaban, quizá con un espíritu más rebelde que el de ahora, la falta de un apoyo decidido de la Administración regional, entonces presidida por José Bono, para comprometerse por la causa de «salvar Toledo». El extinto «Ya» recogía el 26 de noviembre de 1986 que «el Consejo de Gobierno en vez de expresar su decidido apoyo a Toledo para presionar ante el Estado en la consecución de ayudas económicas concretas se descolgó con un comunicado retórico y anodino más propio de unos juegos florales que de una administración institucional comprometida con los intereses de su territorio y de sus ciudadanos».
El que fuera corresponsal de ABC y Cronista Oficial de la Provincia, Luis Moreno Nieto, se refería a este mismo asunto en enero de 1987 en la revista «Hispania Nostra». «Aparte de acordar la iniciación de los trámites precisos para que el Casco Histórico de Cuenca alcance también la misma nominación que Toledo, el Gabinete del presidente Bono se ha limitado, de momento al menos, a hacer una declaración tan llena de retórica como falta de promesas positivas. El Ayuntamiento y especialmente su alcalde (Joaquín Sánchez Garrido) hacen lo que pueden y esperan que ayude el Ministerio de Obras Públicas, pero la verdad es que este apoyo no se ha concretado todavía en ninguna disposición legal», escribía esos días Moreno Nieto.
La reacción de Bono
Y, ¿qué recogieron las crónicas en los periódicos de entonces sobre la reacción de José Bono al enterarse, en 1986, de que Toledo había sido declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad?. Que había que conseguir el título también para Cuenca, por lo que su Gobierno estaba promoviendo que la Unesco declarase a esta ciudad Patrimonio de la Humanidad. Y se consiguió, de forma muy merecida, el 7 de diciembre de 1996 en Mérida (México).
Para celebrar estos primeros diez años, el Ayuntamiento de Cuenca ha organizado más de 120 actos que se desarrollarán hasta finales de año. Para desarrollar este programa se cuenta con 500.000 euros, de los cuales la mitad serán aportados por el Ayuntamiento de Cuenca y la otra mitad por entidades colaboradoras, así como la Diputación Provincial conquense y la Junta de Castilla-La Mancha. Y coincidiendo también con este X Aniversario, según informó la Junta en un comunicado, el Gobierno regional ha organizado también en Cuenca la exposición «Don Quixote ilustrado por Salvador Dalí», que fue inaugurada por el propio presidente de la Junta, José María Barreda. Sin embargo, por ahora, el Gobierno regional no sólo no ha organizado ningún acto para conmemorar estos veinte años en Toledo sino que ni siquiera ha habido algún pronunciamiento desde la Consejería de Cultura o de algún responsable autonómico.
Lo mismo que cuando Toledo celebró sus primeros diez años como ciudad Patrimonio de, el mismo año en que Cuenca recibió la distinción en México, que no hubo tampoco ni una línea, ni un recordatorio de la efemérides por parte del Gobierno regional.
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8 comentarios:
Hay que ser sinverguenza. Toledo se duele de un puñado de euros, no llega a 200.000, por unas actividades culturales conmemorativas en Cuenca.
Hay que ser sinverguenza y olvidar los miles de millones de las antiguas pesetas que a Toledo le ha supuesto la capitalidad.
Hay que ser sinverguenza y olvidar que el nuevo hospital de Toledo tiene una financiación de 400 millones y la reforma del de Cuencano pasará de 50.
Hay que ser sinverguenza por olvidar que el REall Patronato de Toledo ha estado metiendo dinero muchos años antes de que fuera realidad el de Cuenca.
Cuenca va a tener que recuperar la dignidad en este engendro de Comunidad por la malas.
Si bien es cierto que de muchas más olvidos y desprecios tenemos para quejarnos en Cuenca que en Toledo, me llaman la atención dos cosas:
- El olvido hacia Toledo como ciudad patrimonio de la humanidad es totalmente interesado y partidista. Aunque muchos se lo esperaban (nos lo esperábamos), las zancadillas del gobierno regional a las ciudades gobernadas por otro partido van a ser continuas durante estos meses, al igual que las carantoñas y los piropos a Cuenca y a los conquenses van a multiplicarse por mil (eso sí, con el lema de siempre: Mucho te quiero, perrito, pero pan poquito), para que todo vuelva a la "normalidad" después de las elecciones.
- Si en Cuenca la prensa y los demás medios reaccionasen ante cualquier desprecio u olvido (interesado o no) como han reaccionado algunos medios en Toledo, otro gallo nos cantaría.
Pues hoy, el agravio les viene porque dicen que en el Directorio de la Junta no aparece la fecha en que Toledo fue declarada Ciudad Patrimonio (Ver ABC, o mejor no verlo).
Dicho esto, no pueden ser una cosa y la contraria. ¿Tenemos más razones para quejarnos que Toledo? ¿o tenemos menos?. Yo creo que más, pero mi antecesor en el espacio opinante parece que lo que quiere es atacar a la Junta con una cosa y con otra.
Seriedad.
Quien sostenga, con los datos en la mano, que Toledo ha sido agraviado en este engendro de Comunidad frente a Cuenca, o es un mentiroso o un siverguenza o las dos cosas.
Toledo, provinciana como Cuenca, ha encontrado el chollo del siglo con este invento de región.
Corte imperial, corte de los milagros, capital del reino, pero capital ¿de que y porque?
Conquenses, la dignidad la tendremos que recuperar por las malas, porque encima de cornudos apaleados.
Como ha podido ver todo el que haya leído con atención el segundo comentario de esta noticia, opino que de muchísimas más cosas ´(y más graves) podríamos quejarnos en Cuenca que en Toledo.
Como lo cortés no quita lo valiente, vuelvo a reafirmarme en lo dicho:
- Que otro gallo nos cantaría si nos quejásemos como se quejan en Toledo por algo sin importancia comparado con lo que pasa aquí. Porque el problema no es que en Toledo se quejen. El problema es que aquí, por cosas mucho más graves, casi todos los medios de comunicación guardan respetuoso silencio, y muchos ciudadanos se conforman con pensar que "podría ser peor". Lo que no podemos es pedirle al ABC de Toledo que se comporte como si fuera "El Día", ni pedirle a los toledanos que imiten a los conquenses y guarden silencio. Si aquí no se hubiera guardado silencio ante atropellos aparentemente sin importancia, no se hubieran cometido otros mucho mayores.
- Que estas súbitas carantoñas a Cuenca e interesados "olvidos" a Toledo no son casuales (aunque sean por una cosa sin importancia). En Cuenca la alcaldía está en el aire. Luego volveremos a las andadas. El tiempo dirá.
Pues en Toledo la Alcaldía está por los suelos...
Pues por eso: Como la dan por perdida, ahora toca fastidiar todo lo que buenamente se pueda, por si acaso.
Es una paradoja pero tiene sentido. El partido socialista pone y seguirá poniendo pasta en Toledo para intentar ganar la Alcaldía. Lo patético es ue en Cuenca aunque no ponga pelas la mantiene, ergo.... cada vez pone menos dinero sobre la mesa por mantener unos votos que considera ya cautivos en Cuenca.
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